martes, 18 de diciembre de 2012
LA POTNIA EQUINA (II)
El esquema A.
En este esquema se verifica la
unión de un démon (en Homero, particularmente asociado al viento) con una
figura femenina hipomorfa en la que se procrean potros rapidísimos, pero
innominados, quedándose todo ello en una esfera prácticamente zoológica o de la
que interesa resaltar únicamente
la excelencia de los animales.
Así, según Il. XX 224, el
viento del norte, Bóreas, cubre yeguas innominadas, adoptando para ello la
forma de un caballo kuanoxaíthj, que traduciremos como “de crin
azul / negra”: el epíteto connota un
carácter equino de los démones implicados e inversamente, antropomórfico de los
caballos protagonistas.
De esta unión nacen potros de
insuperable casta, motivo de gloria del regio poseedor de la yeguada de 3.000
ejemplares, el dardánida Erictonio, según Homero el hombre más rico de su
tiempo. La ligereza de estos potros era tal, que además de casi volar sobre los
campos, también parecían galopar sobre “la rompiente de la canosa costa” (Il.
XX 229). Con ello, se hace ya presente el elemento acuático, marino, frecuente
en otras realizaciones tanto del esquema A como del B.
El esquema A reaparece en
Aristóteles HA 572a13ss., quien
relata que en Creta se da el fenómeno de que las yeguas en celo pueden ser
fecundadas por el viento (šcanemoûsqai). Sin embargo, posiblemente
Aristóteles sustituiría a Bóreas el homérico «viento del Norte», por meros
puntos cardinales pròj ƒrkton § nóton “hacia el norte o el sur”, hacia
donde vagan enloquecidas las yeguas hasta que se agotan o «llegan al mar». Es posible
que el inciso de 572a14 sobre la forma particular de
cría caballar cretense según la cual no se formaban yeguadas aparte sino que
los sementales y las yeguas estaban juntos, indique incredulidad sobre un hecho
aparentemente fabuloso.
jueves, 13 de diciembre de 2012
LA POTNIA EQUINA (I)
Introducción
En el largo proceso de la
domesticación de los animales, los caballos suplantaron a otros équidos como
instrumento insuperable durante siglos de control rápido y permanente del
territorio.
Homero presenta como cosa del
pasado una situación en la que los procedimientos de apropiación de caballos
rozan el abigeato y las actividades del cuatrero, narrados en tonos épicos por
Néstor el ¶ppóta (GerÉnioj) (Il. XI 671 ss.), el gran experto en la
lucha con carros (Il. IV 322). Frente a ello, Homero presenta prósperas
explotaciones dedicadas a la reproducción y cría controlada de caballos para la
selección de castas extraordinariamente veloces destinadas a la guerra o a su
banco de pruebas, la competición. Gracias a la constitución de yeguadas y al
desarrollo de una importante infraestructura humana y de medios, el caballo es
el valioso resultado de esmerados cuidados, mantenido estabulado ante el
peligro de ser robado o de escapar de forma incontrolada precisamente hacia los
campos donde pacen las yeguas.
Como dice Delebecque, aún antes
de la guerra de Troya el caballo tenía un gran «valeur marchand», lo que le
convertía en una enorme fuente de riqueza para su poseedor, al que convenía
poner de relieve la progenie divinao demónica de sus animales.
En la Ilíada, además de
los extraordinarios caballos de origen divino, se practican cruces para la
mejora de razas ganaderas. En Il. XI 697 ss., el padre de Néstor, Neleo,
se cobra 300 cabezas diversas de ganado por cuatro caballos de los que había
sido desposeído por los eleos.
En la épica arcaica kuanoxaíthj
(voc. y a veces nom. -aˆ) se aplica a Posidón, el divinal caballo Arión y en
una ocasión (HCer.347) a Hades, también llamado en la Ilíada klutópwloj ‘de
famosos potros’.
miércoles, 5 de diciembre de 2012
La dieta 'dura' que transformó a los caballos
Un equipo de investigadores ha verificado que los caballos se desarrollaron mediante la selección natural, que fue un proceso lento, pero con momentos relativamente cortos de adaptación al medio.
Los científicos, entre los que están dos profesores de anatomía de la Universidad de Nueva York y unos investigadores del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES), llegaron a esta conclusión después de examinar los dientes de 6.500 caballos fósiles que representaban 222 diversas poblaciones de más de 70 especies extintas del caballo.
Los fósiles, que se corresponden a los más de 55 millones de años de historia de esta especie, certifican que hubo un tiempo 'crítico' de retraso entre la evolución de los dientes y las modificaciones en su dieta que provocaban los cambios en el clima, que podía ser de hasta un millón de años, pero finalmente triunfaban los mejor adaptados a las nuevas circunstancias.
Los investigadores contaron para su trabajo con la gran cantidad de restos de caballos prehistóricos con los que cuenta el Museo de Historia Natural Americano. Como ha señalado Florent Rivals, del IPHES, gracias a ello han podido descubrir las respuestas de la especie frente a su entorno, algo que los biólogos no pueden hacer. "Elegimos los caballos porque no hay 'agujeros' en su historia", asegura.
Gracias a la metodología desarrollada por otro coautor, Nikos Solounias, correlacionaron la abrasión de los dientes con su alimentación, a la que se correspondía el desgaste. Descubrieron, así, que hace 55 millones de años, los caballos primitivos americanos, que vivían en una selva tropical, comían frutas y hojas blandas, por lo que sus molares eran cortos.
Hace unos 40 millones de años, la selva se convirtió en bosque templado, y un millón de años después las piezas dentales de los caballos ya eran más altas y complejas, lo que sugiere que hubo un proceso de selección natural muy intenso.
El tercer cambio tuvo lugar hace unos 18 millones de años, cuando el bosque se transformó en praderas de gramíneas, mucho más duras de masticar, y de nuevo los molares sufrieron una selección y aumentaron en altura, para soportar mejor el desgaste.
Es decir, que la selección se produjo en momentos muy concretos de cambio ambiental, provocando saltos evolutivos , fruto de mutaciones, que favorecieron a los caballos mejor adaptados al alimento disponible.
Eso sí, entre el cambio en el entorno y la dieta y las modificaciones transcurrió un millón de años o más. "Ese tiempo de retraso es crítico, reconocen los autores.
Los caballos extintos, recuerdan, siempre se han utilizado como modelo para explicar la selección natural. "Muchas veces nos han dicho que somos lo que comemos. Ahora sabemos que es verdad", ha señalado su colega Thomas Scandalis, también de Nueva York.
jueves, 15 de noviembre de 2012
jueves, 8 de noviembre de 2012
lunes, 22 de octubre de 2012
jueves, 11 de octubre de 2012
viernes, 14 de septiembre de 2012
jueves, 6 de septiembre de 2012
martes, 7 de agosto de 2012
miércoles, 11 de julio de 2012
lunes, 2 de julio de 2012
lunes, 18 de junio de 2012
TAUROMAQUIAS NEOLITICAS (III)
En los diversos abrigos del monte de Valosandero, en Soria, paseo por los numerosos frisos prehistóricos pintados en las cuevas y abrigos hispanos, el toro , aislado o en grupos, campa por sus respetos, primero en el arte paleolítico, como animal sagrado y posteriormente en el arte levantino expresionista y dinámico, conformando escenas en las que el hombre se nos aparece frente a él en actitud de lidia, de lucha y de culto al toro entre otros.
Destacar la notable escena “el toro de hachos “encontrada en el Covachón del Puntal (Valonsadero).
Representa la captura de un toro visto lateralmente en posición de
acometida, en el que destacan dos apéndices que pueden representar armas en
forma de hachas clavadas, a la altura de la cruz y sobre las ancas, frente a
un hombre que aguanta la embestida asido con una mano a las astas, mientras
con la otra maneja una especie de muleta alada como para dar salida al animal
en una faena de lidia.
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En cuanto a bóvidos se refiere, se estima que existían tres tipos:
- El de cuernos largos, en lira o media luna, y frente ancha.
- El de perfil frontal cóncavo y cuernos en gancho.
- El de cuernos en rueda.
Y es normal que existieran estas variedades en España, e incluso alguna más, por ser nuestra nación, zona de paso entre los Continentes y haber influencias tanto del Bos taurus primigénius (mayoritaria), como del Bos taurus brachycerus. Demostrado por las imágenes de la Cueva de Hoja, sita en Panes (Asturias).
A- Toros aislados.
B- Representaciones de toros entre varias figuras sin formar escenas con ellas.
C- Toros en grupo o en manada.
D-Toros en relación con figuras humanas.
D1- Juegos.
D2- Caza.
E- Representaciones simbólicas relacionadas con el toro.
E1- Escenas simbólicas.
E2- Figuras antropomórficas.
(En la columna de la derecha están representados algunas pinturas de los abrigos de Valonsadero)
: Cuevas del Prado del Navazo y Callejón del Plou, en Albarracín, con frisos de grandes toros a los que los naturales de la comarca llaman «Los toricos»
jueves, 7 de junio de 2012
jueves, 17 de mayo de 2012
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